¡Hola a todos! ¿Qué tal? Yo no sé ni dónde estoy últimamente, voy tan corriendo a todos los sitios que no llego bien a nada. Para el día a día, sí tengo que decir que últimamente estoy siempre con muchas ganas de arreglarme, de añadir color a mi rutina, de ir más o menos bien presentada y tener una buena cara, así que para ello estoy usando el producto que vamos a reseñar a continuación. Se trata de la base de maquillaje Even Better Glow Light Reflecting de una de mis marcas favoritas (que no sé por qué, no uso más) y no es otra que Clinique.

Como podemos ver, la base por fuera tiene un envase muy sencillo, de plástico con letras blancas y el tapón plateado. No es nada aparatoso y eso se agradece. Pienso que al ser de plástico, va a ser muy fácil poder aprovechar al máximo el contenido. 

De esta base nos dicen que tiene una cobertura de ligera a media. Yo no me atrevería a tanto. Es una cobertura muy ligera, que con un par de capas se puede conseguir algo más. Pero si es una base que deja una piel preciosa. Os lo prometo, la deja tan bonita, tan lisa, unifica tan bien el color... Y la característica principal es que parece que la luz está saliendo de la piel, se ve una piel sana, favorecida, lozana... 

Como he comentado, unifica muy bien el tono de la piel y para mí es algo que se agradece porque yo tengo muchas manchitas muy sutiles que me gusta más que cubrir unificar. 

La piel no se ve para nada recargada, es como si fueras sin maquillaje alguno y es muy cómoda de llevar, parece que no llevas base, además de no hacer para nada un efecto máscara. Sin embargo, no deja un efecto oleoso, si no que se va aterciopelada sin resecar para nada.

La duración es alta, incluso con calor. El domingo tuve un evento y la usé, porque la verdad es que yo no busco cobertura. Me preparé bien la piel, me la apliqué sobre las dos de la tarde y llegué a mi casa a las once y media de la noche. E hizo muchísimo calor, estuvimos a más de 30 grados. No sudé nada con ella, la parte del labio superior (que es la que siempre se me compromete a mí con el sudor) llegó intacta... me ha parecido increíble siendo una base de maquillaje con tanta luminosidad, tan glolw, que dure tantísimo.

Otra cosa que me parece genial es que tiene SPF 15. Yo que no soy de ponerme protector porque con todos me escuecen los ojos, necesito estos productos que aporten aunque sea un poquito de protección. Aún así y pese a esto, no es una base que fotografíe nada mal, al contrario. No he probado a fotografiar con ella puesta de noche, pero de día va muy bien.

Una cosa que me parece genial y eso me parece un buen indicador de que estamos ante un producto de alta gama, es que tienen un montón de tonos con subtonos a elegir, para que cualquier piel, desde la más clara hasta la más oscura con todos sus matices, puedan escoger. Mi tono en concreto es el CN02 Breeze y es el más claro. Me queda perfecto. 

En cuanto a la textura, pues cabría esperar que fuera muy líquida, pero no, es ligera pero no en exceso, algo que realmente a mí me gusta, para mí es perfecta esta textura. 

Vamos a ver el antes y el después. 

Os dejo esta parte de mi cara porque es donde tengo más imperfecciones y manchitas.

Y por aquí tenéis la piel con dos capas de maquillaje, puestas con brocha para alcanzar la máxima cobertura. A mí me gusta, me parece un acabado precioso. 

El precio de esta base es de 30,90€ y contiene 30 ml. Para mí, merece totalmente la pena invertir en ella, y lo estoy corroborando con el uso que le estoy dando. 

Nada más por ahora, espero que os guste y ¡os espero en el siguiente!